Chaos Blogging
La Red Social: de por qué perdieron los Winklevoss
Llega a su final el melodrama-trabalenguas Winklevoss VS Zuckerberg (¡vaya apellidos!) y la razón resulta clara: el club elitista a que aspiraban los gemelos olímpicos no era Facebook, ¡eso es todo!
Quiero aclarar que “perdieron” significa que se fueron con sólo 65 millones que les otorgaba un acuerdo previo (2008) del pastel que significa Facebook con ganancias calculadas de 2000 millones en el 2010 y un crecimiento del 158% comparado con el 2009. O sea, una nada deshonrosa manera de perder si tenemos en cuenta que ese acuerdo reporta hoy 160 millones en stocks dado el crecimiento de un 440% del valor de esta red social en los últimos 3 años.
Sin embargo, la decisión del juez Alex Kozinski del Noveno Circuito de la Corte Federal de Apelaciones de los EE. UU implica efectivamente una derrota para los hermanos, en tanto les niega cualquier acción posible sobre el futuro económico de Facebook:
“Los Winklevoss no son los primeros en intentar ganarle a un competidor, en corte, lo que no pudieron ganar en el mercado […] Ellos, con la ayuda de un equipo de abogados y un asesor financiero, hicieron un trato bastante favorable si tenemos en cuenta la reciente actividad del mercado […] Por alguna razón ahora quieren anular este acuerdo. Como Corte de Distrito no encontramos fundamento para permitirlo […] En algún punto esta litigación debía terminar y ya hemos alcanzado ese punto.”
O sea ¡DONE, FINITO, SE ACABÓ!. Gana Zuckerberg (que igual carga con la sospecha de ser un pequeño manipulador y mentiroso “scheming son of a bitch”) y pierden los Winklevoss que independientemente de su mérito desde el punto de vista de haber concebido una idea similar, su aura olímpica y su actitud de “… tenemos más clase que tú, ¡wirdo!” no pudieron probar en Corte que el creador de Facebook efectivamente les haya robado la idea. Y la razón es simple: no lo hizo.
LAS IDEAS ESTÁN EN EL AIRE
El mundo está lleno de personas con ideas similares; especialmente en contextos donde la innovación intelectual es el “pan de cada día”.
El sitio que idearon los hermanos, HarvardConnect, era una especie de dating site de Harvard que incluía, según sus aspiraciones declaradas, un .edu en el dominio para darle una cierta “exclusividad académica”. O sea, su idea inicial era básicamente excluyente en tanto se proyectaba en el circuito universitario. El sitio cambió su nombre a ConnectU después que saliera el sitio social de Zuckerberg, TheFaceBook.com.
Es un hecho que los hermanos contrataron a Zuckerberg para que trabajara en su proyecto como programador (sobre PHP; no necesariamente el más demandante lenguaje de programación), pero esto dista de probar que su idea fuera un red social a nivel global.
La coyuntura apunta a un par de sucesos sujetos a muy diversas interpretaciones: Por un lado el programador original de los gemelos, Victor Gao, se las había dejado en la uña para irse a trabajar con Microsoft. Y por otra parte – según sugiere la película The Social Network – los gemelos quedaron impresionados por el éxito de visitas de un sitio misógino publicado por Zuckerberg donde los estudiantes podían otorgarle un “rating” de atractivo a sus compañeras universitarias, y que obtuvo miles de hits en un par de días.
O sea, ¿buscaban los Winklevoss un programador que “armara” su idea o un geek que además, les garantizara tráfico a su sitio?. Para mi, estos son 2 contratos por separado.
Una de las primeras comunicaciones entre el team Winklevoss y Zuckerberg es muy clara respecto a las intenciones de estos. En un correo de Dyvia Narendra (el tercer hombre del team Winklevoss) a Zuckerberg, tras ser este referido como programador por Victor Gao, Narendra le explica: “We’re very deep into developing a site which we would like you to be a part of and … which we know will make some waves on campus.”
Señalo la parte final porque ilustra el objetivo (refiriéndose al proyecto): “un sitio con el cuál sabemos que levantaremos algunas olas en el campus” (haremos algún ruido – diríamos en Español- en el campus, en el recinto universitario). Es decir, nada de un directorio de perfiles inclusivo, una red global que nos comunicara a todos.
¡EL NOMBRE LO DICE TODO!
Como dice el slogan de una muy popular y barata cadena de tiendas en Miami “¡El nombre, lo dice todo!”.
ConnectU (así, con la U en mayúscula) habla de individualidad, se proyecta hacia adentro. Encierra el espíritu de las cofradías elitistas universitarias en los EU; su filosofía es la exclusión. Como apunto más arriba, ese era igualmente el espíritu del nombre original HarvardConnect.
Facebook por su parte (literalmente “libro de caras” ) se proyecta hacia afuera. Es un espacio de relaciones donde “socializamos” en público (esta filosofía los llevó incluso a violar normas de privacidad en sus inicios), un “directorio de perfiles abiertos” donde todos estamos al alcance de todos QUEDANDO LA ACEPTACIÓN O NO DE UNA SOLICITUD DE “AMISTAD” EN MANOS DEL RECEPTOR Y NO DEL SISTEMA.
La filosofía de Facebook es la inclusión, la proyección social desde la elección. En esencia, la visión relacional que implica el social media. (Photo Credit: Times Magazine)
Mientras ConnectU es la “sociedad de élite” de la tradición de las sociedades secretas norteamericanas (como “Skull and Bones” de Yale, que lista entre sus ex miembros a varios presidentes de los EU), Facebook es “el patio”, la sociedad abierta, el valor de interconectarse compartiendo sucesos, eventos y preferencias; la comunicación social “inclusivista” via Internet.
La película The Social Network resuelve el conflicto en una frase magistral en boca de Zuckerberg refiriéndose a los hermanos Winklevoss “Si hubieran inventado Facebook, habrían inventado Facebook!”.
TEMA Y CONFLICTO
El conflicto se mueve en el escurridizo terreno de la Propiedad Intelectual y de ninguna manera sobre un concepto nuevo.
El concepto de redes sociales ha sido desarrollado desde principios del S.XX basado en la “teoría de los Grafos” (en los estudios sociales) y la “teoría de los seis grados de separación” según la cual todas las personas del planeta están conectadas a través de no más de seis personas.
Respecto a las redes sociales en Internet, tenemos a las pioneras MySpace y Xing, basadas en “los círculos de amigos” y que igualmente fracasaron (de algún modo) por su incapacidad para proyectarse en un terreno de todos.
Por ahora y hasta que aparezcan nuevos pretendientes a co-founders (ya anda Paul Cegla revoleteando sobre Zuckerberg otra vez) el creador de Facebook pagará lo acordado a los Winklevoss y continuará expandiendo su visión en la otra novela, no menos interesante, “Google VS Facebook”. Garantizo que no le faltarán emociones a su aburrida vida de programador; como dice en refrán “el éxito tiene muchos padres”.
(Esquema de la Teoría de los Grafos)
NOTA
No debemos olvidar que las habilidades de Zuckerberg como programador fueron la razón por la cuál fue contactado inicialmente.
Ya desde muy joven Zuckerberg programaba juegos, creó una red de contacto para el negocio de su padre dentista, ZuckNet, y antes de entrar a Harvard ya había ganado la atención de Microsoft y AOL por la creación de un Media Player, “Synapse”, que utilizaba la inteligencia artificial para decidir las preferencias de los usuarios.